En la tienda . . .

Como en la mayoria de los lugares, siempre existe una famosa "Tiendita de la esquina" esa a la que puedes acudir en caso de alguna emergencia, atendida siempre por el señor buena onda, en mi caso, sucede que esa "tiendita" si esta en una esquina, y hoy, tuve que acudir, 3 años viviendo en ese lugar y hoy me sucede esto . . .

- Hola, buenos dias - Mi alegria mañanera es algo especial, solo dura unas dos horas
- Buenos dias- Me constesto amablemente la hija del tendero, que no paraba de sonreir
- Mira Necesito esto, esto y esto- Mi lista de super es chida
- Claro, aqui tienes
- Cuanto es? - Pregunte, viendo amenazada mi cartera.
- A ver, son . . . 47 pesos
- Ok, aqui tienes - Extendiendo un enorme billete de morelos
- Oye, te digo algo?
Mmm . . . Ese tono lo conozco, tendre que decirte que no? No creo, soy demasiado curioso.
- Si, claro
- Tu me gustas . . .
- ¿?
- Si, desde hace tiempo, me gusta verte caminar, cada vez que pasas te observo, pero creo que tu no lo notas . . .
- ¿?¿?
- En serio, solo que, bueno, tu sabes, como es mi papa, por eso es que no te he dicho nada, pero ahora como no esta el, ni mi mama, pues . . .
- ¿?¿?¿?
- Que dices?
- Que digo de que?
- De lo que te dije, que me gustas mucho
- Que bueno
- Nada mas?
- Si
- ¿? . . .
- Mi cambio?
- si, toma . . .

Tome las tres monedas, y sali de ahi, extrañado, si un poco, prometiendo, notar a quienes me observan cada vez que camino . . .

Ah, si, lo olvidaba, tengo 21.5 y ella apenas va a los 15, no me gusta ser un asaltacunas . . .